El Centro Cívico de Pedro Muñoz se ha convertido este viernes, 11 de julio, en el escenario de un emotivo homenaje a la joven deportista pedroteña Elena Alfaro, quien con tan solo 17 años ha logrado proclamarse campeona del mundo y de Europa de balonmano playa con la selección española. Un doble título histórico, conseguido en Túnez y Turquía respectivamente, que ha llenado de orgullo a su municipio.
El acto, cargado de emoción y simbolismo, ha contado con la presencia del alcalde Alberto Lara, familiares, amigos, miembros del club Deportivo Retamar CB, quipo al que pertenece Elena, su entrenador, así como autoridades locales y vecinos que no han querido perderse la celebración de esta gesta deportiva.
Durante su intervención, el alcalde ha destacado los logros de Elena como “toda una proeza deportiva a pesar de su juventud”, asegurando que “ya solo el hecho de estar convocada con la selección española es motivo suficiente de orgullo para Pedro Muñoz, pero el haber sido campeona del mundo y de Europa, y además decisiva en la final del Mundial marcando el gol en el último segundo, es algo extraordinario”.
En ese contexto, Alberto Lara adelantaba que Elena Alfaro, tas su aprobación en pleno, será nombrada Pedroteña de Honor, la primera persona en ostentar este reconocimiento. Un gesto institucional que pretende reflejar el ejemplo de esfuerzo, constancia y valores que representa Elena para toda la juventud pedroteña.
Durante el acto, Elena Alfaro ha recibido el cariño de su pueblo y algunas sorpresas por parte del Ayuntamiento. “Queríamos que estuvieran presentes su familia y su familia deportiva, para reconocerle públicamente su mérito y agradecerle lo que ha hecho por llevar el nombre de Pedro Muñoz a lo más alto”, explicaba Alberto Lara.
Por su parte, Elena, visiblemente emocionada, ha compartido su experiencia asegurando que “si me lo llegan a decir hace unos años, no me lo creo”. La doble campeona ha confesado que el balonmano forma parte de su vida desde niña y que ha tenido que hacer sacrificios como “no salir o no quedar a veces con mis amigos”, pero que todo el esfuerzo “merece la pena”.
Estudiante de segundo de Bachillerato, compagina estudios y entrenamientos con disciplina: “entrenábamos tres días a la semana, una hora y media por la tarde-noche, para poder estudiar antes”. Su compromiso y madurez ha quedado patente al afirmar que no tiene prisa por cambiar de club pese al interés de otros equipos: “prefiero irme cuando me vaya a estudiar”.
Como mensaje final a otros jóvenes que sueñan con alcanzar metas deportivas, Elena ha lanzado un consejo claro: “que no dejen de perseguir sus sueños, que se esfuercen, porque al final el esfuerzo siempre tiene recompensa”.
Elena Alfaro se convierte así en un referente para sus vecinos de Pedro Muñoz. Su historia demuestra que, con esfuerzo, humildad y pasión, los sueños también se cumplen.
Desde este viernes, Pedro Muñoz no solo es cuna del Mayo Manchego, sino también de campeonas del mundo.